Resumen:
El comercio, sinónimo de desarrollo y progreso desde la pre-historia ha presentado a lo largo de tiempo grandes cambios que ha afectado a la humanidad, llegando a evolucionar a definiciones cada vez más eficientes y formales de negociación, como la compra y venta.
A medida que el desarrollo tecnológico y nuevos conceptos (como la Globalización) ganaban terreno en el mundo moderno, de igual manera surgían nuevas y novedosas formas de hacer negocios a la par de éstas nuevas y revolucionarias tendencias tecnológicas. Con el Internet y su posterior masificación a nivel mundial nace el Comercio Electrónico y sus diferentes modelos son muy bien acogidos y rápidamente rompen paradigmas del comercio tradicional como distancias y horarios.
A pesar que el Comercio Electrónico ha alcanzado en la actualidad niveles de desarrollo y popularidad muy elevados en países desarrollados, su utilidad en países en vía de desarrollo como el nuestro se ve opacada por las dificultades en el desarrollo de las comunicaciones, la masificación de forma de pago digital y en los aspectos logísticos no considerados en el despacho de producto; centrando el contenido de este artículo en presentar las pautas para encontrar una solución orientada a este último problema.
